ADN y el embrión en desarrollo
Al interior de casi toda célula en todo organismo
viviente existe una larga molécula escalonada en espiral conocida
como ADN. La información contenida en la molécula de ADN proporciona
un "calco", o un conjunto de códigos, para crear otras moléculas
usadas por la célula.
A medida que el organismo se desarrolla, las
diferentes partes de la molécula de ADN, llamadas genes, se decodifican
y son leídos por las células. Cada gen contiene instrucciones
para crear una molécula en particular necesaria para el cuerpo
en desarrollo.
A medida que se desarrolla el organismo, los
diferentes genes pueden ser leídos en diferentes células. El destino
final de cada célula, ya sea si se convierte en una célula de
la piel, célula nerviosa, una célula del riñón o una célula ósea,
depende de los genes que se lean. Si alguno de los genes está
perdido, o no ha sido leído, o se ha leído fuera de secuencia,
o ha sido alterado de alguna forma, la célula u organismo puede
experimentar cambios drásticos.
La sincronización de este proceso depende de
la fase de desarrollo del embrión y de la ubicación de la célula.
Las células del ojo en desarrollo, por ejemplo, usan diferentes
combinaciones de genes que las células del cerebro o las células
de la piel. Los embriones que aquí aparecen están todos en la
misma fase de desarrollo. Sus similitudes y diferencias físicas
corresponden a variaciones en sus genes.
|